EL AGUA COMO ELEMENTO ARQUITECTÓNICO
El agua cubre más del 70% de la superficie de la tierra en forma de ríos, acuíferos, ríos subterráneos, glaciares, casquetes polares y océanos, existen cuerpos de agua naturales y artificiales, de agua dulce y salada. La circulación y conservación de agua en la Tierra se conoce como ciclo del agua que hace que este líquido vital se mueva continuamente de un lugar a otro y de un estado a otro.
El agua es el recurso más importante para la vida y un elemento fundamental en la arquitectura al ser un recurso más en la construcción del espacio. Como sabemos, el agua es un recurso renovable pero no inagotable, por lo que es indispensable que la arquitectura observe cuidadosamente su entorno y procure utilizar el agua como un elemento vinculado a la sostenibilidad a través de una adecuada gestión de este elemento natural.
El agua en el diseño de edificios
El agua juega un papel vital en la arquitectura bioclimática y debe ser considerada en la planificación del diseño como un elemento de la naturaleza que afecta la interacción del ser humano con el entorno construido.
El agua es una de las principales encargadas de construir la topografía de nuestro entorno y generar los diferentes ecosistemas en los que se desarrolla la vida, es un elemento generador de patrones, símbolos, sensaciones, un límite físico y de transición. Esta puede incorporarse dentro del diseño arquitectónico como una forma de mejorar la salud mental y el bienestar de los individuos y la sociedad, en espacios cerrados o abiertos a través de estanques, jardines acuáticos, piscinas, cascadas interiores y más.
El manejo del agua
La industria de la construcción tiene un impacto ambiental directo sobre los ciclos y cuerpos de agua tanto superficiales como subterráneos ya sea por los movimientos de tierras, excavaciones o cualquier tipo de labor que ocurra dentro del área de construcción, modificando así los flujos y la calidad del agua.
Además, en algunas zonas el agua de lluvia cae en exceso, o por el contrario hay periodos prolongados de sequía. Todas estas situaciones deben preverse durante la etapa de diseño con el fin de identificar, planificar y ejecutar las medidas más adecuadas para el manejo del agua según el tipo de terreno, minimizando el impacto ambiental y promoviendo el uso racional y eficiente del agua disponible por medio del diseño hidrológico.
Sistemas de manejo sostenible del agua:
- Captación de agua de lluvia: En la recolección del agua de lluvia con fines domésticos se acostumbra utilizar la superficie del techo como captación. El agua que cae del cielo es canalizada, filtrada y almacenada en un tanque o depósito para su posterior uso en servicios sanitarios, irrigación de huertos y jardines, lavar los automóviles o lavar la ropa del hogar.
- Zanjas de conducción: Son agentes propiciadores de almacenamiento de humedad para los vegetales, a través del almacenamiento temporal de escorrentías superficiales. Estas son ideales para las personas que viven en lugares muy húmedos ya que permiten mover lentamente el exceso de agua para evitar daños por erosión e inundaciones.
- Baño seco: El baño seco es una alternativa barata y ecológica contra los baños con descarga convencional, ya que estos funcionan sin agua, por medio de un separador de desechos sólidos y líquidos lo que permite ahorrar dinero y contribuir al ambiente. En los depósitos bajo el baño seco se almacenan y secan los residuos para su descomposición y transformación en compost ecológico
- Biojardineras: Las biojardineras son sistemas naturales para el tratamiento, filtrado, proceso y reutilización de aguas grises o jabonosas. En la actualidad se han construido en Costa Rica aproximadamente 130 sistemas de tratamiento. El producto de las aguas depuradas ha sido usado para riego de cultivos, de jardines, entre otros usos.
- Drenajes sostenibles: Es una red de drenaje relleno de vegetación, compost y/o desechos. El flujo del agua, junto con la zanja ancha y poco profunda, está diseñado para maximizar el tiempo que el agua pasa en la zanja, lo que ayuda a la recolección y eliminación de contaminantes, barro y escombros. La principal función del drenaje sostenible es reducir el caudal producido por la lluvia, pero además tiene otras, como es impedir la contaminación de las aguas, minimizar costes económicos en la gestión de pluviales y mejorar el paisaje urbano.
- Pozos de absorción: Es un hoyo excavado en el suelo, rellenado con piedras, que facilita la infiltración del agua en el suelo. Se emplea para evacuar las aguas grises o las aguas de lluvia. Es un sistema muy sencillo y poco costoso que permite evitar que un terreno se sature de agua en la superficie.
Las sequías, la contaminación que reduce las fuentes de agua disponibles, el crecimiento urbano de las ciudades y el aumento del consumo del agua imponen una nueva cultura del agua, por esta razón es vital investigar y conocer acerca de todos los sistemas sostenibles disponibles para su adecuada gestión.
Al incorporar medidas de ahorro, conservación y reutilización de las aguas dentro de nuestros hogares, promovemos un estilo de vida saludable y respetuoso con el medio ambiente.
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